Las pruebas diagnósticas en el embarazo

Analíticas y ecografías, las más comunes

Pruebas diagnósticas en el embarazo

A lo largo del embarazo te harán diferentes pruebas para comprobar el correcto desarrollo de tu bebé, y descartar tenga alguna alteración cromosómica, como el síndrome de Down, o una malformación. Algunas de ellas consisten en un simple análisis de sangre o en una ecografía, otras en cambio entrañan riesgo para el embarazo.

La ecografía


La ecografía constituye un elemento esencial para el diagnóstico de la salud del bebé y es pieza fundamental para la detección de malformaciones. A lo largo del embarazo se suelen realizar tres ecografías:

  • En la semana 12, se comprueba el grosor del pliegue nucal a través de la ecografía denominada translucencia nucal, que puede ser signo de algunas anomalías fetales.
  • En la semana 20 de embarazo se practica otra ecografía fundamental para comprobar el desarrollo del bebé. 
  • La ecografía del tercer trimestre, los especialistas están muy pendientes de la colocación del feto de cara al parto.

Además de estas exploraciones ecográficas de rutina, el ginecólogo puede decidir realizar alguna más ante alguna enfermedad de la madre (diabetes gestacional), anomalía en el feto (crecimiento intrauterino retardado, espina bífida...) o de urgencia por complicaciones graves en el embarazo.

El cribado del primer trimestre


  • El cribado o screening combinado del primer trimestre es una prueba que combina un análisis de sangre materno, una ecografía del feto y la edad de la madre. Los resultados obtenidos dan las probabilidades de que el feto tenga alguna alteración cromosómica.

  • En la sangre materna se estudia la presencia de niveles anormales de una hormona, la gonadotrofina coriónica humana (HCG), y una proteína, la PAPP-A.

  • Estos datos se combinan con la edad materna y la medida de la nuca del bebé, obtenida con una ecografía.

La amniocentesis


  • La amniocentesis consiste en obtener una pequeña cantidad de líquido amniótico mediante una punción que atraviesa la pared del útero y la ayuda de la ecografía,

  • De la muestra obtenida, se aíslan las células fetales y se analizan para saber si tiene alguna enfermedad cromosómica, como el síndrome de Down.

  • Se puede realizar a partir de la semana 14. Antes es complicada y existe mucho riesgo para el embarazo.

La biopsia corial


  • En la biopsia corial, con la ayuda de la ecografía, el médico, bien a través del útero o de la vagina, toma una muestra pequeña de las vellosidades coriales, que en un futuro será la placenta.

  • Se puede realizar entre la semana 10 y 14 de embarazo y se realiza cuando se sospecha que el bebé puede sufrir alguna enfermedad cromosómica (por antecedentes maternos o paternos) y se desea un diagnóstico temprano.

Cordocentesis 


  • La cordocentesis consiste en la extracción de una muestra de sangre del cordón umbilical por medio de un punción a través del útero materno, con la ayuda de la ecografía.

  • La muestra de sangre obtenida permite estudiar los genes del feto o si el feto tiene alguna enfermedad o si hay incompatibilidad con el Rh materno.

  • Se puede realizar a partir de la semana 16 de embarazo.

Resonancia fetal 


  • La resonancia fetal es una prueba que apenas se practica, pero que es muy útil cuando se sospecha alguna malformación morfológica o se desea conocer su alcance. Tiene una resolución de imagen mejor que la ecografía, pero su utilización está limitada por los movimientos fetales.

  • Es completamente segura para el feto y la madre (solo está contraindicada cuando la embarazada lleve un marcapasos o clip ferromagnético para aneurisma cerebral). Tan solo se recomienda no usar contraste.

Test prenatal no invasivo


  • También se conoce como análisis de sangre materna para detectar ADN fetal. Se pueden estudiar los cromosomas del bebé sin poner el embarazo en riesgo, ya que tan solo se necesita una muestra de sangre de la madre, obtenida a partir de la semana 10 de embarazo

  • Hay que tener presente que no se detectan todas las enfermedades cromosómicas, como ocurre con la amniocentesis o la biopsia corial. Se pueden diagnosticar el síndrome de Down, Patau, Edwards y defectos en los cromosomas sexuales.

El control del bienestar fetal


  • Por medio de diferentes pruebas se puede sospechar si el feto dentro del útero está o no en peligro.

  • Una de ellas es el electrocardiograma fetal, más conocido como monitorización, Esta prueba, que consiste en colocar unos sensores sobre el vientre materno, sirve para controlar los latidos del corazón del bebé y la existencia o no de contracciones uterinas,