La importancia de la consulta preconcepcional y los suplementos de ácido fólico, según ABC

En el artículo Ácido fólico: el aliado imprescindible para un embarazo saludable, publicado recientemente en el periódico ABC, se afirma que todas las mujeres que estén planificando un embarazo deben tomar al menos 400 microgramos de ácido fólico al día”. En este sentido, María Jesús Domínguez, matrona, ex presidenta de la Federación de Asociaciones de Matronas de España y de la Asociación de Matronas de Madrid, incide en “la importancia de la consulta preconcepcional”, precisamente para empezar con la suplementación de ácido fólico antes de que se produzca el embarazo. “Incluso con una dieta sana y adecuada, todas las guías médicas indican que hay que suplementar con ácido fólico”, añade María Jesús Domínguez en el artículo de ABC.
La suplementación de ácido fólico reduce el riesgo de los DTN
La trascendencia de la suplementación con ácido fólico antes y durante el embarazo radica en la prevención de un tipo de enfermedades congénitas: los defectos del tubo neural (DTN). El tubo neural es una estructura que se cierra en las primeras semanas de la gestación, cuando la mujer a menudo ignora que espera un bebé. Recubre la médula espinal y si hay un fallo en su cierre se producen malformaciones que afectan al cerebro y la columna vertebral del bebé, como la espina bífida o la anencefalia. “Es importante que el cierre se produzca de forma correcta para el buen desarrollo del bebé, por lo que la mujer tiene que contar con umbrales de folatos adecuados. Si la mujer empieza a tomar el ácido fólico cuando se entera de que está embarazada, el cierre del tubo neural ya se podría haber producido, por eso es importante que empiece con la suplementación desde el momento en que busca un embarazo”, señala en el artículo de ABC el Dr. Javier Ruiz Labarta, especialista en ginecología y obstetricia en el Hospital Gregorio Marañón, de Madrid.
Con los suplementos de ácido fólico disminuyó la incidencia de los DTN
En ABC se explica como en la década de los 80 en España y en los países de nuestro entorno, sociedades médicas y autoridades sanitarias empezaron a recomendar la suplementación con ácido fólico a las mujeres que estaban buscando un embarazo para reducir la probabilidad de estos defectos del tubo neural. “En estos años, el porcentaje de bebés nacidos en nuestro país con defectos congénitos ha descendido del 2,2% al 0,96%, según datos del Estudio Colaborativo Español de Malformaciones Congénitas (ECEMC)”, se dice en el artículo. Esta disminución se debe en parte a la “suplementación sistemática en todas las mujeres embarazadas”, añade.