La anovulación: ¿Por qué no ovulo?
Cuando la mujer no ovula, el embarazo es imposible. Descubre las causas
La anovulación es una de las causas más frecuentes de infertilidad. La mujer por el motivo que sea no ovula, aunque pueda tener la regla. Y si no hay ovulación es imposible que la mujer se pueda quedar embarazada. La anovulación puede ser crónica, es decir, la mujer no ovula nunca, o deberse a algo circunstancial, provocada por ejemplo por un peso muy bajo o por pasar por situaciones de gran estrés.
¿Qué es la ovulación?
Cuando una mujer, por el motivo que sea, no ovula el embarazo es imposible. Como nos cuenta la Dra. Begoña Martínez, directora de IVI Pamplona, “la ovulación consiste en la selección, preparación y expulsión de un ovocito maduro del ovario de la mujer, que debe producirse de manera natural una vez al mes aproximadamente. Es el proceso que nos permite a las mujeres disponer de la célula necesaria para poder ser fecundada y producir un embrión”.
La ovulación no es un proceso fácil. Que se produzca o no depende de muchos factores que se tienen que poner de acuerdo.
“Si el cuerpo humano en general ya me parece maravilloso, el de la mujer es más especial si cabe, y la ovulación es solo un ejemplo de uno de los procesos que permite que la mujer cree una nueva vida en su interior. Este precioso mecanismo que debería de producirse de manera fisiológica y natural cada mes puede fallar y hablamos de anovulación o falta de ovulación. Entonces algo tan bonito se vuelve una pesadilla para muchas chicas”.
Dra. Begoña Martínez, directora de IVI Pamplona.
¿Por qué no se produce la ovulación?
En ocasiones alguna pieza de ese complicado engranaje, falla y no se produce la ovulación:
✅ Puede circunstancial. ”Es curioso saber que todas las chicas podemos tener algún ciclo anovulatorio, sin que notemos nada o como mucho algún retraso en la regla o alguna molestia leve. Si es algo puntual, no tiene repercusión”, dice la Dra. Martínez. Se conoce como disovulación.
✅ Pero en ocasiones es crónico y la mujer no ovula nunca. “Esto puede acarrear consecuencias ginecológicas, endocrinas o de infertilidad", añade.
Una de las causas es un mal funcionamiento en la sincronización entre la hipófisis, una glándula que se encuentra en la base del cerebro, el hipotálamo, y los ovarios. Estas dos partes del cerebro se encargan de regular la secreción de las hormonas. “Es tan importante esta sincronización que los ginecólogos lo denominamos ‘eje hipotálamo-hipofisario-ovárico’. Cada una de estas partes manda señales a las demás en forma de hormonas para comunicarse y poder completar el proceso de ovulación”, afirma la doctora Begoña Martínez. Si no funcionan correctamente, puede producirse una falta de hormona luteizante y la Gonadotropina Coriónica Humana (HCG). Son hormonas que controlan el ciclo menstrual y “animan” a que el folículo madure y se convierta en un óvulo. “Todos los pasos y eslabones son igual de importantes para la ovulación y si uno falla toda la cadena se rompe y provoca la anovulación”, dice la doctora Begoña Martínez.
¿Por qué puede fallar la ovulación?
Hay varios motivos por los que se produce este mal funcionamiento de la hipófisis y el hipotálamo:
- Bajo peso.
- Estrés.
- Ejercicio excesivo.
- Tumores.
- Diabetes.
- Insuficiencia renal o hepática.
- Hiperprolactinemia.
- Síndrome de ovario poliquístico.
- Alteraciones tiroideas.
- Insuficiencia ovárica precoz.
La importancia de la vitamina D
Muchos estudios han demostrado que es más difícil que la mujer se quede embarazada cuando presenta bajos niveles de vitamina D en sangre, por debajo de los 30 ng/ml.
La vitamina D interviene en la selección de folículos y en la maduración de los ovocitos, pero también en la receptividad del endometrio (necesaria para que el embrión se implante en el útero y crezca).
La vitamina D se consigue a través de la luz solar y puesto que nuestro país cuenta con suficientes horas de sol, siempre se ha pensado que su deficiencia no era un problema en la población española. Pero los resultados de los análisis indican lo contrario, y demuestran que entre el 20 y el 60% de la población tiene déficit de esta vitamina. Para aumentarlos, muchos estudios aconsejan exponerse a los rayos del sol durante unos 15 minutos al días (evitando las horas centrales, cuando son perjudiciales para la piel), incrementar el consumo de pescado azul y huevos y, si el médico lo considera necesario, tomar suplementos de vitamina D.
¿Hay regla sin ovulación? Los síntomas de la anovulación
Tener la regla no quiere decir que tus ovulaciones sean normales. Es decir, puedes tener tu menstruación, pero no ovular “Son dos procesos relacionados y sincronizados en diferentes momentos del ciclo ovárico y uterino, pero que pueden ocurrir el uno sin el otro. Es verdad que si tienes reglas cada mes, sin grandes desviaciones en tus ciclos, es probable que ovules correctamente”.
Entonces, ¿cuáles son los síntomas? La Dra. Martínez nos lo cuenta:
- Las reglas muy irregulares o directamente la falta de ellas,
- Ciclos muy largos, de más de 35 días.
- La falta de cambios en el moco cervical puede poner sobre aviso.
- Sangrados uterinos excesivos.
- Infertilidad. De hecho, a menudo se diagnostica porque la mujer no se queda embarazada.
¿Cómo se diagnostica la anovulación?
Para diagnosticarla, el ginecólogo primero realizará una exploración física y una historia clínica exhaustiva. También se practican analíticas hormonales y ecografías, en diferentes fases del ciclo para comprobar si ocurren los cambios que deben de producirse.
El tratamiento de la anovulación
Para intentar enmendar esa falta de ovulación, lo primero es “corregir el eslabón que provoca que toda la cadena falle”, afirma la Dra. Begoña Martínez. .
- Si la mujer tiene sobrepeso u obesidad: normalizar su peso.
- Si practica excesivo deporte: reducir el entrenamiento.
- Corregir la disfunción de otros órganos como riñones, hígado o tiroides.
Pero a veces no es posible llegar a descubrir porqué motivo se produce la anovulación o no se puede corregir lo que lo provoca. "En función del resultado de las pruebas y de la historia clínica de la paciente y su pareja se propondrá el tratamiento de reproducción asistida que requiera, de más sencillo a más complejo. Son tratamientos que por suerte están disponibles y permiten a cada vez más mujeres cumplir sus sueños de ser madres", explica la doctora Begoña Martínez
- Inducción de la ovulación con medicación oral o mediante inyecciones y coitos programados. Esta sería la solución para mujeres con el síndrome de ovario poliquístico (SOP) es una de las causas más frecuentes de infertilidad en parejas jóvenes. “No tiene cura, comprende una patología endocrina que no podemos eliminar, pero sí podemos ayudar a la mujer con tratamiento farmacológico”, señala la doctora
- Inseminación artificial.
- Fecundación in vitro
- En los casos de fallo ovárico, donación de ovocitos.