Los riesgos del embarazo después de los 40 años

Tienes más posibilidades de padecer algunas enfermedades

Cuando una mujer se queda embarazada con 40 años o más tienen más posibilidades de sufrir algunas enfermedades, aunque hoy gracias a las revisiones prenatales en las consultas ginecológicas esos riesgos están más controlados.

Embarazo más peligroso por enfermedades de la madre

Los embarazos con más de 40 años son de riesgo


Cuando una mujer con más de 40 años se queda embarazada, generalmente su gestación se considera como “de riesgo” y los controles y pruebas médicas suelen ser más frecuentes. Además, se recomienda que durante la gestación sea atendida no en las consultas ginecológicas de los ambulatorios, sino en maternidades o unidades de Obstetricia de los hospitales. Existe una razón para tanta precaución: las patologías que pueden aparecer con el embarazo en ocasiones empeoran por la edad.

No obstante, el riesgo puede verse atenuado por que como nos indica la doctora Carmen Martín Blanco, ginecóloga del Hospital Nuestra Señora del Rosario, en Madrid, “las mujeres que se quedan embarazadas con 40 años y más son madres muy implicadas y que cumplen muy bien con las prescripciones que se les dan. Acuden a todas las citas lo que permite controlar muy bien los riesgos”.

El embarazo a los 40 (y  tantos) no es motivo para dejar de trabajar, salvo que por las características del puesto suponga un riesgo para la madre o el bebé o por que hayan surgido complicaciones o exista el peligro de que se puedan padecer algunas enfermedades. 

Enfermedades del embarazo que se agravan

Según nos explica la doctora Carmen Martín Blanco existe más riesgo de padecer hiperémesis gravídica (vómitos sin control), diabetes gestacional, hipertensión y desprendimiento de placenta. Pasamos revista a cada complicación del embarazo:

Gestante de 40 años con muchos vómitos

Hiperémesis gravídica o vómitos incontrolados

Las náuseas y los vómitos son frecuentes en el primer trimestre de embarazo y no suelen suponer un riesgo en el embarazo. Pero cuando los vómitos originan una pérdida de peso superior al 5%, deshidratación y la aparición de cuerpos cetónicas o la orina o cetonuria, debido a la imposibilidad para alimentarse e hidratarse correctamente, se da una situación que puede llegar a ser preocupante: la hiperémesis gravídica, que afecta más a las mujeres mayores de 40 años.

Es una situación que puede llegar a ser peligrosas cuando la deshidratación es importante. Por suerte, hoy los embarazos suelen estar muy controlados y no suele llegar a darse. Normalmente se ingresa a la paciente para hidratarla correctamente, recuperar las sales minerales perdidas y administrar por vía intravenosa los fármacos para las náuseas.

Diabetes gestacional

Es un trastorno del embarazo bastante frecuente cuya incidencia aumenta a medida que se incrementa la edad materna. Se produce porque en la segunda mitad del embarazo el organismo de la mujer produce grandes cantidades de una hormona, el lactógeno placentario, y aumenta la necesidad de otra, la insulina, que permite que el azúcar procedente de los alimentos se almacene para su posterior uso. El organismo de algunas mujeres no es capaz de producir toda la insulina que necesita, por lo que aumentan de forma peligrosa los niveles de glucosa en sangre. 

Hipertensión arterial: preeclampsia y eclampsia

Se da con mayor frecuencia en las mujeres mayores de 40 años, sobre todo porque en ocasiones son mujeres que ya sufrían de hipertensión antes de quedarse embarazadas. Cuando la tensión alta se acompaña de otros síntomas, como niveles altos de proteína en la orina o proteinuria, e hinchazón de manos, pies o cara se trata de una preeclampsia. Cuando esta situación se agrava deriva en una eclampsia y aparecen síntomas como dolor de cabeza, hinchazón excesiva, visión doble, borrosa o con luces y convulsiones. Es una enfermedad muy peligrosa que puede poner en riesgo a la madre y al feto.

El fatídico desprendimiento de placenta

La placenta es el órgano que nutre a tu bebé a lo largo de todo el embarazo. Se inserta en la pared del útero y allí permanece de forma fija hasta el parto. Una vez que el bebé nace se desprende de la pared y sale, lo que conoce como alumbramiento. Pero a veces, casi siempre durante el tercer trimestre, la placenta se separa de la pared del útero de forma prematura, causando sangrado. En algunos casos sólo se separa una parte de la placenta, en otras ocasiones se desprende totalmente.

En cualquier caso, el desprendimiento prematuro de placenta disminuye el suministro de oxígeno y nutrientes al feto, lo cual lo convierte en una complicación muy grave. Uno de los factores que lo provocan es que la madre haya sobrepasado los 40 años de edad.

Embarazadas con más de 40 años y tensión alta

Enfermedades del bebé que se agravan 


Feto de madre de 40 años o más: más complicaciones en el embarazo

Riesgo de crecimiento intrauterino retardado (CIR)

“El crecimiento intrauterino retardado conlleva una mayor morbi-mortalidad del bebé y de ingreso en las Unidades de cuidados Intensivos Neonatales”, explica la doctora Carmen Martín Blanco. CIR es el proceso que no permite al feto crecer todo lo que puede y provoca un peso al nacimiento por debajo del percentil 10 para la edad gestacional. Son bebés que nacen muy pequeños y por lo tanto más débiles.

Riesgos de anomalías cromosómicas

“Las mujeres nacen con un número determinado de óvulos y cuando superan los 40 años esos óvulos están más expuestos a mutaciones, lo que supone que el material genético está dañado”, señala la doctora Martín Blanco.

Por eso el riesgo de dar a luz un niño con ciertos trastornos cromosómicos, como el síndrome de Down, se incrementa con la edad de la mujer. Hoy la ciencia permite diagnosticar estas enfermedades en el mismo embarazo antes del nacimiento, con pruebas no invasivas, como el test prenatal no invasivo, y en algunos casos con métodos invasivo como la biopsia corial o la amniocentesis.

Más riesgo de aborto

“El riesgo de aborto en el primer trimestre cuando se superan los 45 años es del 60%”, señala la doctora Martín. A menudo ese incremento en la muerte fetal y que se produzca un aborto en el primer trimestre de embarazo a menudo es como consecuencia de todas las patologías maternas o porque el feto cuenta con anomalías cromosómicas tales que la propia naturaleza impide que la gestación siga adelante.

Y el parto, ¿tiene más complicaciones?

Hoy no hay consenso entre los médicos a la hora de establecer si el parto en las mujeres de 40 años y más presenta más riesgos. “Hay estudios que dicen que sí, pero otros concluyen lo contrario”, señala la doctora Martín Blanco. Lo que sí que está claro es que el incremento en los partos prematuros que se dan a esa edad se deben a las enfermedades que antes hemos mencionado, pero no por la mecánica del parto.

 

Caridad Ruiz
Redactora experta en Salud