Pierdo los embarazos: ¿Qué pruebas debo hacerme?

Dar con la causa de los abortos de repetición

Para muchas parejas no hay nada más desesperante que perder un embarazo detrás de otro. Pero, ¿cuándo esto se considera algo anormal? Tener un aborto es algo fisiológico y ocurre más veces de las que pensamos. Pero no se debe empezar a realizar pruebas con la primera pérdida.

Pruebas en abortos y pérdidas gestacionales

Las sociedades científicas nacionales e internacionales no se ponen de acuerdo sobre cuántos abortos hay que tener para iniciar el estudio de la pareja. En España comenzamos la investigación cuando se han tenido 2 o más pérdidas gestacionales consecutivas antes de la semana 20 de gestación. O más de 3 no consecutivas. Es lo que en nuestro país llamamos, ser infértiles.

En esta definición no entran ni los embarazos ectópicos (los que están fuera de su sitio) embarazos molares o abortos bioquímicos, aquellos en los que da positivo la prueba de embarazo pero no se llega a ver saco gestacional en la ecografía. Aunque también hay científicos que sí aconsejan que deberían incluirse en la definición las pérdidas de gestaciones no visualizadas.

¿Y qué pruebas podemos realizarme?

Existen muchas y voy a exponer sólo aquéllas que hayan demostrado aumentar las posibilidades reproductivas de nuestras parejas. De hecho, un 50% de las familias se quedará sin saber cuál es la causa de sus abortos después de haberlas realizado todas.

1ª prueba: estudio genético de la pareja


Pruebas genéticas en abortos de repetición

  • Es importante estudiar si los progenitores son portadores de alguna alteración cromosómica realizando un cariotipo. Pero esto, la alteración de los cariotipos paternos, sólo explica entre el 3 y el 5 % de los casos.
  • Si volviera a producirse un aborto, siempre es importante estudiar si existió alguna alteración genética de los restos abortivos, pues nos aportará información muy valiosa sobre su causa. De hecho, en más del 75% de los casos, el motivo del aborto es que el embrión se ha desarrollado de forma anómala y esto es lo que ha ocasionado la pérdida del bebé.

¿Qué es el cribado genético preimplantacional o PGT-A?

Consiste en hacer la biopsia al embrión antes de transferírselo a una paciente y analizar si es cromosómicamente normal. Así se acorta el tiempo hasta conseguir un embarazo, pues se selecciona aquel embrión que no tiene alteraciones. El único inconveniente es que la pareja tiene que someterse a un ciclo de reproducción asistida para poder realizar esta técnica.

2ª prueba: estudio hematológico


Se solicita una analítica especial que estudia si existe alguna alteración de la coagulación que pueda justificar las pérdidas. Es como si la formación de pequeños trombos pudiera ser la causa. El tratamiento con heparina puede mejorar las posibilidades reproductivas en pacientes con alteraciones en la coagulación.

Existe, por ejemplo, una enfermedad, que se llama síndrome antifosfolípido y que explica el 10-15% de los casos. Tratando a la paciente con aspirina a dosis bajas y heparina puede solucionarse el problema.

3ª prueba: examen del útero


Pruebas del útero en caso de perder embarazos

Esta exploración de la cavidad uterina se realiza mediante histeroscopia: consiste en meter una cámara dentro del útero y verlo por dentro, además de realizar una ecografía de alta resolución.

  • Debemos descartar malformaciones uterinas. En ocasiones hay septos o tabiques que dividen el útero; repararlo puede solucionar estos problemas. O úteros en T, que se podrían solucionan ampliando la cavidad uterina.
  • Otras malformaciones uterinas: algunas se pueden reparar y otras no.
  • Pueden existir una infección o inflamación en el endometrio (endometritis) que también puede ser responsable de los abortos repetidos. Esto es algo novedoso y todavía no se tiene muy claro cuál es la pauta antibiótica adecuada -pues en muchas ocasiones no se detecta el microorganismo responsable-, ni cuánto tiempo debe prolongarse, ni si adicionar probióticos, vaginales u orales mejorará el pronóstico.
  • Si extirpamos miomas o pólipos que interfieren en la cavidad que albergará vuestro bebé o que son demasiados grandes, se podría resolver el problema. Son como granos que salen dentro del útero. Pero no todos los miomas son responsables de  abortos. Hay que valorar a cada paciente para determinar si hay que quitarlos o no; depende de su posición, tamaño o número. Además,  al quitar los intramurales hay que esperar entre 6 meses y un año para gestar.
  • Debemos estudiar si el cuello del útero es incompetente, es decir, es incapaz de mantenerse cerrado durante el embarazo. Si esto es así, con una operación que anuda el cuello (se llama cerclaje) o con la colocación de un anillo, que se llama pesario, que recoloca el cuello y lo elonga. En ocasiones, administrar progesterona puede ser una buena opción, pues tiene acción relajante e inmunomoduladora.

4ª prueba: descartar alteraciones autoinmunes 


Abortos de repetición: enfermedades autoinmunes

También se estudian alteraciones del sistema inmune que pueden provocar abortos de repetición, como anticuerpos anticeliaquía o incompatibilidades de grupo sanguíneo.

De hecho, no hay ninguna terapia inmunológica en la actualidad que haya demostrado aumentar las posibilidades reproductivas de estas pacientes.

Hay otras alteraciones inmunológicas que se estudian en algunas parejas (determinados HLA, KIR, etc), pero todavía no han demostrado científicamente que su estudio y tratamiento sean eficaces.

Buenas costumbres: cuida tu estilo de vida

Es recomendable, evitar conductas nocivas como el tabaco, las drogas (cocaína, marihuana), alcohol, cafeína  en exceso. Aunque no existe evidencia clara de que los hábitos no saludables, el sobrepeso o la exposición a tóxicos estén relacionados con la ocurrencia de abortos de repetición. Por ello, siempre es beneficioso recomendar hábitos saludables a nuestras parejas. 

Cuidado emocional intensivo 


Terapia emocional en caso de abortos de repetición

Consiste en un control cercano y exhaustivo de la pareja, durante las primeras semanas de gestación. También conocido como "tender loving care", parece que reduce el estrés de la gestación y favorece la evolución del embarazo. Además recomendamos el seguimiento de estas pacientes en una Unidad de Alto Riesgo, pues se han descrito una mayor tasa de complicaciones durante el embarazo.

Cualquier actividad que reduzca el estrés de estas pacientes será beneficiosa:

  • Técnicas de relajación como mindfulness, respiraciones o meditación.  
  • Ejercicio suave: yoga, Pilates o natación. Evita los deportes de impacto o agresivos.
  • Dieta antiestrés: aquellas ricas en triptófano (huevos, carnes, semillas) o magnesio (frutos secos o chocolate negro)frutas y verduras (crudas y de vivos colores, ricas en probióticos y vitaminas), etc.
  • Bebidas relajantes: té verde, melissa, pasiflora, lavanda, manzanilla, tila, zumos de frutas, leche caliente...

Un consejo más: mantén la calma...

Sólo excepcionalmente algunas mujeres seguirán abortando y recurrirán a la adopción, el acogimiento, al útero subrogado (en los países donde es legal) o a la donación de gametos. Pero, por suerte, la mayor parte de nuestras parejas conseguirán su objetivo. Se sabe que en parejas con 2 abortos previos, en el 75% de los casos tendrán a su niño, sano y en casa sin ningún tratamiento. Así que ánimo y no desesperéis, pues la infertilidad puede tener solución.

 

Dra. Onica Armijo Suárez
Ginecóloga especialista en Fertilidad del Hospital La Paz (Madrid)