Cómo evitar las náuseas y vómitos en el embarazo
Consejos y remedios contra los ascos de la gestante
Es el síntoma más frecuente del embarazo. Muchas embarazadas en los primeros tres meses de gestación sufren náuseas, con vómitos o sin ellos. Es una sensación muy desagradable. Te explicamos qué causa estos ascos, y cómo aliviarte.
Por qué aparecen las náuseas
Quizás la molestia más frecuente del embarazo sean las náuseas o ascos, sobre todo al comienzo de la gestación. De hecho, se trata de uno de los primeros síntomas de embarazo. Algunas investigaciones afirman que afecta entre el 70% y el 80% de las embarazadas. Un estudio de referencia realizado en la Universidad de Leicester y publicado en el British Journal of General Practice, revelaba que en las mujeres con náuseas, el 85% las experimentaba dos veces al día y que el número total de las horas por embarazo fueron 56. Algo más de la mitad de los episodios de vómitos (el 53%) fueron matutinas: se dieron entre las 6 y las 12 de la mañana.
La hormona del embarazo
El porqué aparecen las náuseas no está claro, aunque la mayoría de los científicos cree que se debe a la presencia en las primeras semanas de la gestación de una hormona llamada gonadotropina coriónica humana (HCG). Esta hormona solo se manifiesta en el organismo humano cuando hay una gestación y, de hecho, es la que miden los tests de embarazo.
Aparece el primer día de la implantación del embrión en la pared uterina y su misión es mantener el cuerpo lúteo, un pequeño quiste ovárico que suministrará oxígeno al embrión hasta que en la décima semana de gestación su función sea sustituida por la placenta. Los niveles de esta hormona crecen paulatinamente hasta la semana 12 de gestación. Luego se estabilizan y disminuyen. Por eso, a menudo las náuseas y los vómitos dejan de experimentarse a partir del segundo trimestre. Pero hay algunas embarazadas, las menos, que siguen con estos malestares durante toda la gestación.
Los estrógenos
Además, gracias a la acción de otras hormonas, como los estrógenos, en el embarazo los alimentos tardan más tiempo en atravesar el sistema digestivo.
¿El sexo del bebé influye en las náuseas?
Es posible que hayas oído que las náuseas son mayores o menores en función del sexo del feto. Este aspecto fue estudiado en la Facultad de Enfermería de la Universidad de Assiut, de Egipto. Al analizar una muestra de 400 mujeres, descubrieron que las náuseas y vómitos eran mayores cuando el bebé era niña.
¿Influyen en las náuseas los trastornos psicológicos?
Es frecuente, achacar los ascos a factores psicológicos. En un estudio realizado en la Universidad de Cambridge, publicado en Psychological Medicine, analizaron si como sufrir depresión en el primer trimestre o tener antecedentes de esta patología se relacionaban con náuseas y vómitos en el embarazo. Llegaron a la conclusión que estos factores psicológicos en combinación con unos niveles elevados de HCG estaban relacionados con estas molestias.
Lo que sí que parece influir es en la depresión posparto. También parece que estas náuseas pueden tener consecuencias para la psique de la madre tras el nacimiento del bebé. Una investigación realizada en la Universidad de Queensland en Australia, publicado en Journal Health Psychology señala que evaluar el impacto que tienen las náuseas y vómitos en el embarazo permitiría identificar las mujeres con riesgo de depresión posparto.
Cómo aliviar las náuseas y los vómitos en el embarazo
No obstante, todo son teorías, porque lo cierto es que no hay nada demostrado, y muchos ginecólogos afirman que en realidad se trata de un proceso de adaptación del organismo femenino a la nueva situación, es decir, al embarazo, y que una vez que el cuerpo se “acomoda”, esos síntomas desaparecen.
Sea por el motivo que sea, las náuseas y los vómitos en el embarazo son una situación tremendamente incómoda para la embarazada. Y hasta que tu cuerpo se adapte a al embarazo, puedes llegar a pasarlo francamente mal. Sin embargo, y para que te tranquilices, queremos decirte que las náuseas y los vómitos del embarazo no suponen ningún riesgo para tu bebé. Para controlarlas te damos algunos consejos:
- Intenta comer poco, aunque sea a menudo. La idea es que no te des un atracón a la hora de la comida y la cena, ya que las ingestas abundantes y copiosas aumentan la aparición de las náuseas. Lo ideal es tomar desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena, y no dejar pasar más de dos horas en ayunas porque la bajada de glucosa agudiza la sensación de náuseas.
- Temperatura de los alimentos: Los fríos se toleran mejor que los calientes.
- Técnicas culinarias: Cuando vayas a cocinar, elige la plancha, el horno o el papillote y procura evitar los fritos o los preparadas con mucha grasa.
Medicamentos
Actualmente existen medicamentos contra las náuseas y vómitos, llamados antieméticos, seguros en el embarazo. Pregunta a tu ginecólogo si puedes tomar esta medicación, las dosis recomendadas. Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid sobre el uso de estos fármacos demostró que casi un 67% de las mujeres los tomaban los días que padecían de náuseas y vómitos.
Hiperémesis gravídica: náuseas y vómitos graves
La hiperémesis gravídica es una enfermedad que solo se da en el embarazo y que provoca vómitos persistentes que puede producir deshidratación. En estos casos a menudo los médicos recomiendan que la mujer ingrese en el hospital para reponer los líquidos perdidos y administrar los fármacos para no vomitar por vía intravenosa.
Y si te preguntas qué ocurre con el bebé, cuando la mujer sufre náuseas y vómitos constantes, una investigación de la Universidad de Soroka, en Israel, publicada en Archives of Gynecology and Obstetrics, no encontró ninguna relación entre la hiperémesis gravídica y complicaciones en el bebé al nacer.