Micronutrientes esenciales antes del embarazo: Ácido fólico y Yodo
¿Qué importancia tienen el ácido fólico y el yodo para el desarrollo del bebé?
¡Has tomado una decisión maravillosa: quieres ser mamá! Es el momento perfecto para empezar a cuidarte y darle a tu bebé lo mejor desde el principio. Las mujeres que desean quedar embarazadas deben asegurarse de tomar suplementos de algunos nutrientes esenciales para favorecer un embarazo saludable y el desarrollo óptimo de su bebé. Por ejemplo, para prevenir la espina bífida y otras malformaciones de la médula, el organismo de la madre necesita ácido fólico. Y el yodo es crucial para la formación y el crecimiento adecuado del cerebro de tu pequeño.
Ácido fólico
El ácido fólico es imprescindible para el óptimo desarrollo del tubo neural. Además, ayuda a construir el ADN y a fabricar glóbulos rojos
- El ácido fólico tiene un papel importantísimo en el desarrollo de tu bebé: en las primeras semanas del embarazo interviene en el cierre del tubo neural, una especie de conducto que recorre lo que sería la espalda del embrión (ten en cuenta que tu bebé ahora mismo apenas mide uno o dos milímetros, menos que un guisante) y que dará origen al cerebro, la médula espinal y tejidos del sistema nervioso central. Cuando el tubo neural no se cierra por completo, la médula espinal queda sin la protección que dan las vértebras. Esto provoca importantes e incurables discapacidades, como la espina bífida.
Si todos los días tomas un suplemento de 400 microgramos de ácido fólico se disminuye el riesgo de defectos del tubo neural en el bebé. Esta es la dosis indicada para todas las mujeres, incluidas aquellas que tienen una variante genética en la enzima MTHFR.
- Además, participa en la formación de glóbulos rojos: Durante el embarazo los requerimientos de folatos se incrementan también porque tu cuerpo necesita generar más sangre para ti y para el bebé que está creciendo.
Los suplementos de ácido fólico antes y durante el embarazo son imprescindibles para el crecimiento fetal debido a su relación con el cierre del tubo neural, la producción de glóbulos rojos y la síntesis de ácidos nucleicos que están presentes en todas las células, y se encargan de almacenar, transmitir y expresar la información genética.
“Podemos asegurar que ninguna otra vitamina es tan requerida durante el embarazo como lo es el ácido fólico”, afirman Miriam de la Puente y Diana Cuenca Gómez, ginecólogas del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Clínico San Carlos (Madrid).
Una de las funciones adicionales que tiene el ácido fólico en nuestro organismo es la producción de ADN, algo crucial desde la concepción del bebé, para que sus genes no contengan errores. “Durante el desarrollo fetal se va a producir el desarrollo de todas las estructuras de un nuevo ser así como su ADN, único para este individuo”, comentan Miriam de la Puente y Diana Cuenca Gómez, ginecólogas del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Clínico San Carlos (Madrid).
El ácido fólico se obtiene a través de la dieta y con suplementos
Nuestro organismo no puede producir ácido fólico por lo que debe ser incorporado con la dieta, fundamentalmente con las frutas y verduras de hoja, espárragos, tomates, pepinos, cereales, frutos secos, legumbres, levaduras, hígado entre otros, y con suplementos. “Debemos tener en cuenta que las cantidades de folatos que se encuentran en los alimentos disminuyen enormemente con el calor. Es decir, al cocinar los alimentos disminuimos drásticamente el contenido de los mismos”, nos aclaran las doctoras Miriam de la Puente y Diana Cuenca Gómez.
¿Por qué hay que tomar suplementos de ácido fólico antes y durante el embarazo?
“Los niveles de folatos en sangre, en la población general, no llegan ni siquiera a la mitad de las dosis recomendadas de 400 microgramos durante el embarazo, por lo que, en situaciones de mayor demanda, como es el embarazo, se hace necesario un aporte suplementario. Los alimentos administrados por la dieta, incluida la mediterránea, no serían suficientes para las demandas materno fetales”.
Miriam de la Puente y Diana Cuenca Gómez. Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Clínico San Carlos (Madrid)
Suplementos de ácido fólico, imprescindibles antes y en el embarazo
Por este déficit de ácido fólico y por la alta demanda que ahora tiene tu bebé de folatos o vitamina B9, organismos nacionales e internacionales, entre los que se encuentran el Ministerio de Sanidad español y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) recomiendan un aporte complementario de 400 microgramos al día de ácido fólico, al menos tres meses antes del embarazo y en el embarazo para la prevención de los DTN. Según diversos estudios científicos, con esta dosis se consigue una reducción del riesgo de entre el 35 por ciento y 70 por ciento de que el bebé desarrolle un defecto del tubo neural.
¿Qué dicen los estudios científicos sobre el ácido fólico?
Hoy, es el único folato que ha demostrado con estudios que previene los DTN. Además, cada día existen más publicaciones científicas que muestran los beneficios que tiene el ácido fólico cuando se administra como suplemento durante toda la gestación, ya que se relaciona con una disminución de la tasa de abortos, de partos prematuros o de enfermedades asociadas a la gestación. El último estudio se publicó en febrero de 2024 en la revista BMC Pregnancy and Childbirth y en él participaron 567.547 mujeres. El estudio encontró una menor incidencia de anomalías congénitas, como los defectos del tubo neural, entre las mujeres que habían tomado ácido fólico en comparación con aquellas que no lo habían hecho (0,102% frente a 0,116%) y mostraron probabilidades significativamente menores de otras malformaciones, como cardiopatías congénitas, fisuras (labio leporino), anomalías del tracto digestivo y de las extremidades (pie zambo).
Yodo: clave en la síntesis de las hormonas tiroideas
El yodo es un oligoelemento esencial para el metabolismo. “Las cantidades que se necesitan de cada oligoelemento son concretas, ya que puede ser perjudicial tanto su déficit como su exceso. Un oligoelemento es toda aquella sustancia biológica que interviene en las reacciones metabólicas de nuestro organismo que permiten mantener un control de agua e iones en nuestro organismo y mantenernos con vida”, dicen Miriam de la Puente y Diana Cuenca Gómez, ginecólogas del servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Clínico San Carlos (Madrid).
¿Cuánto yodo se necesita durante el embarazo?
La mujer embarazada necesita un suplemento extra de al menos 200 microgramos/día en forma de yoduro potásico. Este suplemento de yodo debería iniciarse lo más precozmente posible antes del embarazo. Solo en las embarazadas con algunas alteraciones de las tiroides, estos aportes serán valorados por el endocrino.
¿Por qué el yodo es necesario en el embarazo?
La principal función del yodo en el embarazo es su intervención en la síntesis de hormonas tiroideas.
¿Para qué sirve el yodo en el embarazo?
“Las funciones de las hormonas tiroideas y por lo tanto, las funciones en las que interviene el yodo son principalmente las de crecimiento, diferenciación y maduración del sistema nervioso central. Por esta función podemos entender rápidamente la importancia que esta sustancia tiene en el desarrollo del embrión y del feto.
- Interviene de forma directa en la formación correcta del sistema nervioso central.
- Posteriormente tras el nacimiento, durante el periodo neonatal, permanece su importante función en el desarrollo y maduración del sistema nervioso central del recién nacido”.
Miriam de la Puente y Diana Cuenca Gómez, Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Clínico San Carlos (Madrid).
La falta de yodo, principal causa del retraso mental evitable
La falta de yodo es un gran problema sanitario, principal causa de retraso mental evitable en el mundo. Según se recoge en los Derechos de la Infancia, “la deficiencia de yodo es, mundialmente y después de la inanición extrema, la causa nutricional más frecuente de retraso mental prevenible”. “Toda madre tiene el derecho a una ingestión adecuada de yodo durante el embarazo, para poder producir la cantidad de tiroxina necesaria para que su hijo tenga un desarrollo mental óptimo”, añade.
“La Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció:
- En la mujer no embarazada las necesidades diarias de yodo rondan los 150 microgramos.
- En la embarazada estas necesidades aumentan un 16 por ciento requiriéndose 200 microgramos de yodo al día”.
Miriam de la Puente y Diana Cuenca Gómez, Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Clínico San Carlos (Madrid)
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