Las vitaminas durante el embarazo

El ácido fólico, el yodo y el DHA son esenciales para tu bebé

Ácido fólico y embarazo

Durante el embarazo tu organismo necesita que  le proporciones mayores cantidades de algunas vitaminas, minerales y otros nutrientes. Ácido fólico, yodo, vitamina D, hierro y ácidos grasos omega 3 (DHA), son esenciales para el desarrollo de tu bebé.

En las 40 semanas que dura tu embarazo, tu cuerpo tiene un triple trabajo. Además de cubrir sus propias necesidades, “fabrica” un bebé a partir una diminuta célula, y genera las condiciones necesarias para que crezca lo más sano posible. Para alimentarle crea un nuevo órgano, la placenta. Y para que el útero y las glándulas mamarias puedan crecer y crecer, produce tejidos nuevos y grandes cantidades de sangre. Por si todo eso fuera poco, cuando pasen esos nueve meses deberá afrontar el parto, el posparto y la lactancia.

Ácido fólico, imprescindible en el embarazo


  • ¿Qué es el ácido fólico?

El ácido fólico es un tipo de vitamina, la B9, o folato, el único que ha demostrado con estudios clínicos que previene los defectos del tubo neural (DTN), como la espina bífida o la anencefalia.

El ácido fólico es el único folato que ha demostrado clínicamente que previene los DTN en todas las mujeres, incluidas las que tienen la variante C677T en la enzima MTHFR. Está demostrado que las mujeres con esta variante asimilan el ácido fólico y se benefician de todas sus virtudes, como la prevención de la espina bífida y otras malformaciones en el tubo neural.

Suplementos de ácido fólico en el embarazo

  • ¿Cómo ayuda el ácido fólico en el embarazo?

El ácido fólico cumple unas importantísimas funciones en el embarazo:

  • Juega un papel fundamental en el desarrollo del cerebro y la médula espinal del bebé. Interviene en el cierre del tubo neural de tu pequeño. Esto ocurre hacia la 6ª semana de embarazo (cuando quizás ni tan siquiera te has hecho el test de embarazo). Ten en cuenta que unas semanas después ese tubo neural se convertirá en la médula espinal y en el cerebro de tu bebé. Si alguna región del tubo neural no se fusiona, los nervios que recorren la médula espinal quedan al descubierto causando importantes discapacidades.
  • El ácido fólico también es esencial para producir nuevas células y que no contengan “errores” en su ADN.
  • ¿Cuánto ácido fólico hay que tomar?

Se recomienda tomar un suplemento de ácido fólico con 400 microgramos al día desde tres meses antes de la concepción y durante el embarazo para la prevención de los defectos del tubo neural.

Comprueba en el etiquetado que tu suplemento contiene ácido fólico y no otras formas de folato, como metilfolato, quatrefolic o 5-MTHF. Estos últimos folatos no han demostrado clínicamente que ayuden a reducir las malformaciones del tubo neural.

Vitamina D, también necesaria para tu embarazo


  • ¿Cómo ayuda la vitamina D en el embarazo?

La vitamina D es necesaria para el crecimiento de los huesos de tu bebé y la buena absorción y fijación del calcio de los alimentos.

  • ¿Cuánta vitamina D hay que tomar?

Las principales sociedades científicas de todo el mundo recomiendan una suplementación de 400-600 UI de vitamina D para la prevención del déficit durante el embarazo. Solo un médico puede aconsejar dosis superiores, cuando los análisis clínicos previos confirmen carencias.

¿Para qué sirven las vitaminas?

Las vitaminas no aportan energía, pero gracias a ellas el organismo aprovecha los hidratos de carbono, proteínas y lípidos suministrados por la alimentación. Además, intervienen en muchos procesos, como el sistema inmunológico o la formación de material genético.

Características de las vitaminas

  • El cuerpo humano no puede crear las vitaminas, así que se tienen que obtener a través de los alimentos o los suplementos alimenticios, excepto la vitamina D que también se puede formar en la piel con la exposición al sol.
  • Las vitaminas que contienen los alimentos son frágiles y se destruyen rápidamente cuando se las expone a la luz, al aire y al calor. Así sucede con la vitamina B9 o folato. En cambio, el ácido fólico se mantiene estable. Por eso se usa en los suplementos alimenticios.
  • Algunas vitaminas no se acumulan en el cuerpo, de modo que es necesario ingerirlas todos los días. Eso ocurre con el ácido fólico, que deberás tomar un suplemento diario de 400 microgramos, la dosis diaria recomendada por las sociedades científicas para que tu bebé tenga a mano el ácido fólico necesario para su desarrollo.

Los minerales: yodo e hierro


Yodo para el cerebro

  • ¿Cómo ayuda el yodo en el embarazo?

El déficit de este mineral sigue siendo unos de los problemas sanitarios de nuestro país, sobre todo en el embarazo, ya que tiene consecuencias negativas e irreversibles en el desarrollo cerebral del bebé y en su función cognitiva.  Algunos estudios  afirman que el déficit de yodo en el embarazo conlleva un cociente intelectual más bajo en el niño.

Para el desarrollo correcto del cerebro de tu bebé y, en concreto, de la corteza neural es imprescindible una hormona llamada tiroxina. Pero en los primeros meses de embarazo el feto no puede fabricarla por sí mismo. Necesita el yodo que le aporta su madre a través de la placenta.

  • ¿Cuánto yodo hay que tomar?

 La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) recomienda 200 microgramos durante todo el embarazo y comenzar, como sucede con el ácido fólico, al menos tres meses antes de la concepción.

Hierro para prevenir la anemia

  • ¿Cómo ayuda el hierro en el embarazo?

    • Es fundamental para tu salud y el desarrollo de tu bebé porque se encarga de la formación de glóbulos rojos para ti y para tu pequeño. 

    • El hierro es el responsable de producir hemoglobina, la parte de los glóbulos rojos que le da a la sangre el color rojo y que les permite transportar la sangre oxigenada a través del cuerpo.

  • ¿Cuánto hierro hay que tomar?

Las sociedades científicas recomiendan, para la prevención de la anemia, asegurar un aporte de 30 mg de hierro diarios durante el embarazo.

¿Para qué sirven los minerales?

Al igual que las vitaminas, no aportan energía al organismo, pero resultan imprescindibles: constituyen tejidos como huesos y dientes, se encargan de que en tu organismo exista un determinado nivel de agua y participan en procesos como la contracción muscular (fundamental para el parto) o la coagulación de la sangre.

Ácidos grasos esenciales: el DHA


DHA en el embarazo

  • ¿Qué son los ácidos grasos DHA?

El DHA (ácidos grasos omega 3) es una forma de grasa poliinsaturada muy necesaria para tu bebé. Para hacerte una idea de su importancia, ten en cuenta que un 15% de nuestro cerebro está compuesto por DHA.

  • ¿Cómo ayuda el DHA en el embarazo?

El DHA tiene un papel esencial en el embarazo: tu hijo capta DHA para la formación de su sistema nervioso y lo hace a través del que tú ingieres.

Se ha demostrado que una ingesta adecuada de DHA en la gestación mejora el desarrollo del sistema nervioso del feto, favoreciendo su desarrollo visual y cognitivo.

El DHA forma parte en grandes cantidades de las membranas de las células del cerebro y la retina, y se relaciona con el desarrollo y el funcionamiento del tejido nervioso