Resueltas tus 5 dudas sobre el cuidado de la piel en el embarazo
Cómo cuidar tu piel y qué productos y tratamientos debes evitar
Tu piel en el embarazo experimenta muchos cambios, como sucede con otras partes de tu organismo, como el estómago, el corazón....
Ten en cuenta que la piel es el órgano más grande de tu cuerpo. Y en el embarazo a medida que tu bebé crece dentro de ti y hasta el parto, tu dermis y epidermis se tienen que estirar y estirar. Además, la piel es muy sensible a los cambios hormonales.
Vamos a responder a tus dudas más frecuentes sobre la piel en el embarazo y sus cuidados con la ayuda de la Dra. Montserrat Fernández Guarino, Directora del Grupo de Investigación en Dermatología, Fotobiología y Cáncer de Piel de la Universidad Alfonso X El Sabio, dermatóloga del Hospital Ramón y Cajal, de Madrid y Jefe de servicio de Sanitas Pirámides y Virgen del Mar.
1 ¿Mi piel cambia con el el embarazo?
Sí, La piel en el embarazo experimenta muchos cambios, por diferentes motivos:
- Aumento del volumen: Como antes comentábamos, la piel en la gestación, sobre todo la que rodea el abdomen, se dilata medida que el útero aumenta su volumen y el bebé se desarrolla. Y no solo se tensa en el área de la barriga. Con el embarazo se produce a menudo una hinchazón, que suele ser ligera, en todo el cuerpo fruto de la retención de líquidos.
- El aumento de algunas hormonas: La dermis y la epidermis son muy receptivas al aumento de las hormonas que siempre se produce con el embarazo. Por este motivo, muchas embarazadas lucen una tez resplandeciente y más hidratada. Los estrógenos, por ejemplo dan un aspecto más luminoso.
2 ¿Cuáles son los cambios cutáneos más importantes en el embarazo?
“Los más comunes son: manchas en la cara (o melasma), las estrías, el acné, el aumento de la sensibilidad cutánea, las arañas vasculares, picor, cambios en los lunares y oscurecimiento de ciertas zonas como las areolas de los pechos, la línea alba del abdomen o la zona genital”, afirma la doctora Montserrat Fernández Guarino.
Cuándo consultar con tu ginecólogo o tu dermatólogo:
- Si notas que una mancha o un lunar que tenías antes del embarazo cambia de forma o color.
- Si experimentas un picor intenso, sobre todo en las palmas de las manos.
- Sufres erupciones con ampollas o descamaciones severas
- Aparece una herida que no se cura o que sangra.
3 ¿Qué influye en el cambio de la piel en el embarazo?
Existen dos circunstancias que van influir en esos cambios:
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Los cambios hormonales.
¿Recuerdas como en la adolescencia tu piel se veía muy diferente a la infancia? Entonces todo era culpa de la revolución hormonal que se estaba produciendo en tu organismo al finalizar la infancia. Con el embarazo sucede algo similar: para que el bebé pueda desarrollarse y el embarazo siga adelante, tu cuerpo produce grandes cantidades de algunas hormonas, que provocan varios síntomas. “Durante el embarazo aumentan los niveles de estrógenos, progesterona y otras hormonas, como la hormona melanocitoestimulante. Estas influyen directamente sobre la pigmentación, la producción de sebo y el crecimiento del pelo”, nos explica la Dra. Montserrat Fernández Guarino. Las consecuencias son el oscurecimiento de algunas áreas de tu organismo y la aparición de acné, incluso en mujeres que nunca lo habían padecido.
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La genética
La predisposición genética puede influir en que tu piel experimente más o menos cambios o que estas modificaciones sean más o menos acentuadas. Por ejemplo, en la aparición de las estrías tiene mucho que ver el aumento excesivo de peso, pero también influye los factores genéticos. Y lo mismo ocurre con las manchas pueden aparecer en el rostro, el cloasma, más conocido como paño del embarazo, “Son machas marrones irregulares que aparecen sobre todo en mejillas frente o labio superior”, afirma la Dra. Montserrat Fernández Guarino. La aparición de estas manchas se debe al aumento de las hormonas que estimulan la pigmentación y tomar el sol sin protección, pero los antecedentes familiares de cloasma aumentan la susceptibilidad a padecerlo. Por eso, las embarazadas con predisposición genética deben ser especialmente cuidadosas y aplicarse una crema con un factor de protección solar muy alto cada vez que salgan a la calle. El estudio Cloasma/Melasma Gestacional: Influíncias Hormonais, Genéticas e Ambientais, publicado en Brazilian Journal of Implantology and Health Sciences, señala que las mujeres con piel oscura tienen un mayor predisposición genética a desarrollar cloasma en el embarazo.
4 ¿Puedo usar cualquier producto para cuidar mi piel?
Como bien sabes, en el embarazo no se pueden tomar algunos medicamentos porque pueden llegar a la placenta, atravesarla, alcanzar al feto y causar problemas en su desarrollo. A través de la piel también pueden llegar sustancias que pueden perjudicar el embarazo y el bebé. Por eso, hay algunos productos y tratamientos cosméticos que no se deben usar. “Hay que evitar los retinoides (como el retinol), el ácido salicílico en altas concentraciones, la hidroquinona y los aceites esenciales en ciertas dosis. Tampoco es el momento de hacer peelings agresivos ni usar dispositivos que emiten energía sin supervisión médica. Siempre conviene revisar las etiquetas de los productos dermatológicos y, ante la duda, consultar con el médico”, afirma la doctora Montserrat Fernández Guarino.
5 ¿Cómo cuidar mi piel en el embarazo?
Como nos explica la Dra. Montserrat Fernández Guarino, la rutina básica para el cuidado de la piel de tu rostro en el embarazo incluye:
- Limpieza suave.
- Hidratación
- Protección solar cada mañana.
- "A partir de los 30 años se pueden añadir antioxidantes por la mañana, como la vitamina C, y por la noche productos como el ácido azelaico o el ácido glicólico, que son seguros", apunta.
"En el cuerpo, es fundamental hidratar bien la piel con productos ricos en ceramidas, glicerol, urea o aceites como el de argán o la manteca de karité”, comenta. Estas medidas si se hacen con constancia puede ayudar a reducir los problemas cutáneos como las estrías.
Asesora:
Dra. Montserrat Fernández Guarino, Directora del Grupo de Investigación en Dermatología, Fotobiología y Cáncer de Piel de la Universidad Alfonso X El Sabio, dermatóloga del Hospital Ramón y Cajal, de Madrid y Jefe de servicio de Sanitas Pirámides y Virgen del Mar.