La primera ecografía: cómo es la primera foto del bebé
¡Tienes un test de embarazo positivo! Tras esos días o meses de espera, la ilusión y la alegría nos inundan. Es entonces cuando se realiza la primera visita al médico, le informamos de los resultados y comenzamos a resolver nuestras primeras dudas del embarazo. Aparecen las primeras molestias, que hacen dudar sobre el desarrollo adecuado de nuestro embarazo, o por el contrario, no notamos nada en absoluto y comenzamos a sospechar si algo puede no ir bien.
La ecografía de la semana 12 es clave En la mayoría de los casos la primera ecografía se realizará en la semana 12 de gestación o el tercer mes, la denominada ecografía del primer trimestre, una de las tres ecografías más importantes y que aportan mayor información durante la gestación. La ecografía del primer trimestre se recomienda realizar entre la semana 11 de embarazo y la semana 13+6 días, calculadas desde la fecha de última regla.
Lo que ocurre es que esta espera puede hacerse insoportable, sobre todo en aquellas mujeres que tienen dudas sobre el curso del embarazo, sobre la localización del embrión, etc. Por ello, este periodo de espera puede hacerse muy largo y estresante en muchas mujeres, sobre todo en aquellas con antecedentes de aborto, de embarazo extrauterino, etc.
La ecografía precoz y sus limitaciones En algunas ocasiones las mujeres tienen la posibilidad de realizarse una ecografía obstétrica de forma más precoz. Es importante conocer lo que se puede esperar de una ecografía tan temprana, ya que puede no coincidir con la imaginación de la mujer al respecto.
- Al principio de la gestación, durante las 4 o 5 semanas desde la fecha de última regla, los ginecólogos podemos a llegar a no ver el embarazo en sí, y sí objetivar otros signos que nos informan de la posibilidad del embarazo. Hasta la semana 5 de embarazo no comienza a verse lo que se denomina "vesícula gestacional" dentro del útero. Posteriormente a partir de la semana 5 y media y más en la semana 6 de gestación, puede objetivarse la denominada vesícula vitelina, en el interior de la vesícula gestacional. Este signo es de muy buen pronóstico de embarazo que precede a la formación del embrión.
- Posteriormente puede objetivase un pequeño embrión, que puede ser incluso más pequeño de 2 milímetros. Cuando el pequeño embrión supera esta medida ya comienza a visualizarse un grupo de células con actividad contráctil. Estas son las células que en un futuro van a generar el miocardio y que constituyen el pequeño corazón del embrión.
En resumen, tener un test de embarazo positivo y realizarse una ecografía muy temprana pueden dar resultados algo contradictorios, por las expectativas que muchos padres pueden tener respecto a este tipo de pruebas. Si sabemos que el límite de la tecnología de los ecógrafos actuales existe, podemos saber que en muchas ocasiones tendremos que esperar para poder tener la primera imagen de nuestro futuro hijo.