¿Uso soluciones yodadas estando embarazada?

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Yodo en soluciones: ¿puedo usarlo estando embarazada?
09 Dic 2015

Las soluciones yodadas son un elemento común en los botiquines caseros, muy empleado para curar y desinfectar nuestras pequeñas heridas. Algunas embarazadas preguntan en consulta si es peligroso tocarlas, curar las heridas de sus hijos o las suyas propias, por lo que vamos a intentar resolver estas dudas.

Pero antes de nada, queremos tranquilizar a las embarazadas que toman suplementos que contienen yodo desde el comienzo del embarazo. No debemos olvidar que el yodo es un elemento básico e indispensable durante el embarazo, influye en el desarrollo neurológico de nuestro hijo, y está lejos de ser perjudicial. Se recomienda su suplementación con 250 microgramos diarios. Pero son las dosis excesivas son las que pueden acarrear un riesgo.

Tiroides fetal y la barrera placentaria

En la semana 10 a 12 de embarazo comienza a formarse el tiroides fetal y pronto comienza a controlar la función endocrina. El tiroides se regula principalmente por la hormona TSH. Y el tiroides fetal precisa de autorregulación desde etapas precoces de embarazo.

La hormona TSH de la madre no es capaz de pasar la barrera placentaria. Por el contrario, el yodo, los contrastes yodados, los anticuerpos antitiroideos o los fármacos contra el tiroides sí que son capaces de atravesar la placenta y pueden afectar la función de la glándula tiroides del futuro bebé.

Peligros del exceso de yodo

El yodo en cualquier ser humano cuando se toma en exceso, produce una disminución de la secreción de hormonas por parte de la glándula tiroides produciendo una enfermedad denominada hipotiroidismo. Si el yodo excesivo es administrado durante el embarazo, produce esta disminución de la función del tiroides fetal, generando un hipotiroidismo en el recién nacido. Este hipotiroidismo puede desencadenar un déficit del desarrollo neuropsicológico, en el desarrollo motor, así como un coeficiente intelectual más bajo.

Evitar el contacto directo

Las soluciones yodadas, como la povidona yodada, han demostrado que aumentan los niveles de yodo en la sangre materna, este yodo traspasa la placenta y produce un hipotiroidismo transitorio en el feto. Por ello, una embarazada debe evitar curar sus heridas con este elemento, así como el contacto directo con él. No obstante, el empleo sobre la piel de otros o su cuidadosa manipulación no debería resultar peligroso.

Dra. Diana Cuenca
Especialista en Ginecología y Obstetricia del Hospital de Torrejón de Ardoz (Madrid)