Fumar, alcohol, estrés... cómo influyen en la fertilidad
La obesidad o la extrema delgadez también impiden el embarazo
Fumar, beber alcohol, llevar una vida con mucho estrés, tener obesidad o, por el contrario, padecer bajo peso pueden influir en tu fertilidad y también en la de tu pareja. Tomarse un copa al salir del trabajo o no llevar una alimentación adecuada pueden, aunque no lo creas, dificultar que te quedes embarazada.
Cómo nos comportamos, cómo comemos, cómo nos movemos, cómo dormimos... influye en cualquier parte de nuestro organismo. Y por supuesto el funcionamiento del aparato reproductor también va a depender de nuestros hábitos y estilo de vida.
Fumar: malo para todo y también para la fertilidad
Los hábitos tóxicos, como fumar, deberíamos desecharlos, porque son malos para todo y para la fertilidad también. En la de la mujer y en la del hombre:
- El tabaco, aunque en dosis que implican una dependencia, puede acelerar el envejecimiento del ovario, de media unos dos años, lo que daña tu reserva ovárica.
- También se sabe que disminuye la calidad del semen e incrementa las alteraciones en el ADN de los espermatozoides, lo que incrementa el riesgo de aborto.
Así que si estáis buscando un embarazo, es un momento excelente para dejar de fumar. Si por ti misma no lo consigues, consulta con tu médico de cabecera. Hoy en los centros de salud existen unidades antitabaco que pueden ayudarte a dejarlo.
Beber alcohol
Los efectos deletéreos del alcohol en la fertilidad son más controvertidos y parece que son reversibles, pero las mujeres no deben exceder de dos raciones al día y los hombres de cuatro.
Aunque nos parezca mucho, en seguida lo hemos superado: si te tomas un par de cañas con el aperitivo y dos copas de vino en la comida y/o en la cena, ya superas la dosis excesiva.
"Si busco el embarazo, ¿puedo tomar café?"
Al café cada vez se le atribuyen más propiedades beneficiosas, debido a los polifenoles que tiene, pero no se debe abusar si deseas quedarte embarazada. Aunque las publicaciones no se ponen de acuerdo, parece que excederse de 3 tazas de café al día puede llegar a ser perjudicial para nuestra fertilidad.
Obesidad: impide el embarazo
Unos de los factores que más importantes que pueden causar esterilidad es nuestro peso: tener un normopeso es salud. Y no solo a nivel cardiovascular y para prevenir la diabetes e incluso el cáncer (se sabe que los tumores malignos de mama o endometrio también se asocian a la obesidad). Contar con un peso adecuado también favorece nuestras posibilidades reproductivas: el sobrepeso y la obesidad pueden disminuir por dos e incluso por tres nuestro objetivo de ser padres e incrementar el riesgo de aborto.
¿Cómo puedes calcular si tienes sobrepeso u obesidad? Uno de los parámetros que más usamos los sanitarios es el IMC ( índice de masa corporal): se calcula dividiendo el peso en kg entre la talla en metros, elevada al cuadrado. Según sea el resultado, se define como:
- Normopeso: 18-24.
- Sobrepeso: >25.
- Obesidad: >30.
- Bajo peso: <18.
La hipercolesterolemia, o colesterol alto, e hipertrigliceridemia, altos los niveles de triglicéridos, en muchas ocasiones se asocia a sobrepeso. Y se sabe que causan subfecundidad, es decir, que se tarda más tiempo en conseguir el embarazo.
Bajo peso: menos nivel de testosterona
Pero también tener bajo peso se ha relacionado en mayores dificultades para conseguir el embarazo en varones, pues tienen menores niveles de testosterona.
En mujeres esto no queda tan claro en las últimas publicaciones, pero algunas afirman que pueden tener peores resultados reproductivos.
Estrés: mejor evitarlo para aumentar la fertilidad
El estrés es otro de los factores que se relacionan con peores posibilidades para lograr el embarazo y tener más pérdidas gestacionales. Valorar cuánto estamos de ansiosos o estresados es difícil, aunque existen escalas que tratan de cuantificarlo. Pero los trabajos no se ponen de acuerdo y algunas investigaciones dicen que sí puede influir y otras que no.
Se sabe que el someterse a cualquier tratamiento reproductivo genera ansiedad y estrés en nuestras parejas y que la llamada “hormona de estrés”, la prolactina, influye en la secreción hormonal y su elevación puede ocasionar alteraciones menstruales e incluso la retirada de la menstruación durante un tiempo, lo que se llama amenorrea secundaria.
Trabajar en disminuir esta situación estresante mediante psicoterapia, terapia de pareja, mindfulness, etc., puede ayudar a mejorar las posibilidades de éxito. De hecho, en parejas con pérdidas gestacionales recurrentes, se incorpora como parte de su tratamiento lo que se denomina el “tender loving care”. Significa que se realizan visitas muy frecuentes al ginecólogo o servicio de fertilidad durante las primeras semanas de gestación para mitigar ese estrés que puede ocasionar una nueva gestación y el miedo a perderlo de nuevo.
¿Cómo puedes aumentar tu fertilidad y la de tu pareja?
"Tener una dieta adecuada, mediterránea, rica en frutas, verduras, frutos secos, semillas, evitando el exceso de carne rojas, alimentos procesados y grasas saturadas, también está demostrando en las publicaciones que puede mejorar nuestras posibilidades.
Realizar ejercicio de forma regular, unos 150 minutos a la semana, es beneficioso para lograr la gestación, sin excedernos tampoco: más de 7 horas de deporte intenso puede aumentar los radicales libres y ser perjudicial para la fertilidad. Los hombres deben intentar no realizar mucho ciclismo o equitación, pues aumenta la presión y temperatura testicular".
Dra. Onica Armijo, ginecóloga especialista en fertilidad del Hospital Universitario La Paz, de Madrid.